El Hno. Abad, Hugo Medina Melcón, dirige una carta a los hermanos de la Cofradía, con motivo de su participación en los actos de la pasada Semana Santa.
Queridos hermanos y hermanas.
Termina la primera Semana Santa en la que he tenido el inmenso honor y privilegio de serviros como Abad.
Como en todas las que he vivido desde hace ya casi 40 años he sentido la enorme emoción de ver a mi Cofradía del alma, la tuya, la nuestra, procesionando y volviendo a llenar las calles con esa impresionante marea de papones de negro y oro.
No es mi empeño vanagloriarme de nada sino mostrar mi orgullo y agradecimiento para con vosotros: los verdaderos artífices de que Angustias y Soledad esté alcanzando cotas cada vez más altas. Braceros, manolas, hermanos de filas, incensarios, navetas, faroles, banderas… a todos ¡GRACIAS!
No obstante, nunca hay que conformarse. Tenemos un potencial enorme y la materia prima más valiosa: cientos y cientos de paponines y paponinas a los que, como ya dije en mi saluda previo a Semana Santa, tenemos la responsabilidad de trasladar las normas de decoro y orden para que procesiones tan multitudinarias como la del Dolor de Nuestra Madre vayan siendo cada vez más ordenadas y, en consecuencia, bonitas para la ciudad de León. Sé que cuento con el apoyo de todos los hermanos para lograrlo. La prueba es que este año ha ido un “pelín” mejor.
Me queda un año de este maravilloso encargo y muchas ganas de hacer todo lo que esté en mi mano para desarrollar ese potencial del que antes hablaba, pero por nuestro papel en la Semana Santa del año 2023….
¡Qué sea enhorabuena!
Hno. Hugo Medina Melcón
Abad de la Cofradía